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Diario YA


 

La escultura invisible de Salvatore Garau y la galería ART- RITE lo consiguen de nuevo

EL VALOR DE LA NADA

Jorge Llopis Planas

Perito Tasador Judicial de Arte.
Presidente de CEPTAPA

Sólo hay algo más temible que un timador español: Un estafador italiano. Y que quieren que les diga, ya puestos a que te esquilmen, prefiero la finezza y maniera italiana. Mientras el español es cutre y visceral en su vulgar estampita, el Italiano persigue la inmortalidad gracias a la Concettualitá. La trascendencia de la Estafa en lo Universal.

En mayo de 2020 la galería milanesa ART- RITE vendió la obra del escultor Salvatore Garau “Sono Io” por 15.000 €. Hasta aquí nada que objetar. Una galería mediocre vende una obra de un creador mediocre. Continuemos. El comprador de la escultura entendió obviamente que una pieza invisible de dos por dos metros tiene sus complicaciones: Seguros, emplazamiento, cesión para exposiciones y por supuesto mantener el anonimato. Yo también lo haría...Así que la misma galería ART-RITE volvió a poner en venta la misma escultura invisible el pasado 12 de octubre y venderla por 28.000€. Una revalorización de casi un 85% en año y medio. Simplemente magistral.

El artista ha argumentado que el éxito de su obra se confirma como “Un hecho incontestable. El principio de incertidumbre de Heisenberg, en el sentido, que la nada tiene un peso pero que el espacio concentrará una cierta cantidad y densidad de pensamientos en un punto preciso, creando las formas más variadas”. Si Heisenberg lo dice, me quedo más tranquilo.

Ahora bien, la obra se vende con un certificado, por tanto ¿Un certificado de la Nada es Nada?. Salvatore Garau, aspira a ser incluido en los libros de Historia del Arte, como lo fue Piero Manzoni con sus latas, Angelo Froglia con sus esculturas de Modigliani y Vicenzo Peruggia con sus copias de la Gioconda ¿Ven la diferencia? El creador Italiano busca la Gloria a lo grande.

De momento todo es legal. Una galería (ART-RITE) vende una obra, lo declara y certifica. Mi pregunta es ¿A quien? De nuevo la cuestión siempre sospechosa del comprador y que tratándose de una escultura invisible yo sólo plantearía dos opciones: O el nuevo comprador es el famoso hombre invisible de Turín, Renato Il Immateriale, famoso coleccionista de intangibles, al que tampoco nadie ha visto, o bien suponer que es ART- RITE quien ha comprado y vendido a si misma la creación de Salvatore Garau. Eso si, artista y galería, no son socios directamente, lo que entonces, si podría suponer un fraude por blanqueo de capitales. La lógica franciscana de Ockham y su navaja debería ser más que suficiente.

Mi dilema moral es si otros como yo, hemos caído en la trampa mediática de ART RITE - Garau o si por el contrario el asunto nos despierta una cierta ternura por la nostalgia por el pufo bien hecho, sigue siendo un arte.

Al menos, la escultura invisible tiene un certificado de originalidad lo que evita que sea falsificada o reproducida por desaprensivos, aunque espero que el documento en cuestión también sea especialmente irreproducible, ya que como bien saben los falsificadores de prestigio, dan tanto valor a la obra como a su documentación. Por tanto les recomiendo que si compran la obra, lo primero sea verificar el documento con un laboratorio de Documentación Criminalística. Yo, lo siento pero de momento, no puedo peritar esculturas invisibles…